En este mes de OCTubre, quizá el OCTavo mes del año, entramos de pleno en el Otoño con todo lo que ello conlleva y no siempre reajustamos nuestro estilo de vida a los cambios de la naturaleza. Este aspecto se está revelando cada vez más determinante, para la ciencia, como condicionante de nuestra salud, y aunque parece obvio, es necesario considerar los cambios a los que nos debemos adaptar en esta fase del año para mantener nuestro bienestar, donde la micoterapia para reforzar las defensas en otoño adquiere un papel esencial.
El otoño es una estación de cambios: bajan las temperaturas, disminuyen las horas de luz y nuestro sistema inmunitario se enfrenta a un mayor desafío. Los hongos medicinales, como el Reishi, el Shiitake o el Maitake, aportan compuestos bioactivos que ayudan a mantener la energía vital y fortalecer la respuesta natural del organismo frente a virus y bacterias propios de esta temporada.
Menos luz, menos vitamina D
La vitamina D es esencial para el buen funcionamiento de nuestro sistema inmunológico. Durante el otoño e invierno, la disminución de la radiación solar limita la capacidad de la piel para producirla de forma natural (Holick, 2007). Diversos estudios han demostrado que los niveles bajos de vitamina D se asocian con una mayor susceptibilidad a infecciones respiratorias (Martineau et al., 2017).
Al mismo tiempo, el incremento de la exposición a la luz artificial y el cambio en los ritmos circadianos puede alterar la calidad del sueño y la regulación hormonal, generando un estrés añadido para nuestro organismo (Bedrosian & Nelson, 2017).
Frío, humedad y mucosas más vulnerables
El descenso de las temperaturas y la humedad característica del otoño también afectan a nuestras vías respiratorias. El aire frío reseca las mucosas, debilitando su función como barrera natural frente a patógenos. Esto facilita la entrada de virus y bacterias responsables de gripes y resfriados (Eccles, 2002).
Por ello, preparar y fortalecer el sistema inmunitario durante estos meses no es solo recomendable, sino necesario.
Micoterapia: los hongos medicinales al servicio de la salud
La naturaleza nos ofrece una herramienta poderosa: los hongos medicinales. Su uso terapéutico, conocido como micoterapia, se remonta a la medicina tradicional de Asia y Europa, y hoy cuenta con un creciente respaldo científico.
Los β-glucanos, polisacáridos presentes en especies como Ganoderma lucidum (Reishi), Lentinula edodes (Shiitake) o Grifola frondosa (Maitake), actúan como moduladores del sistema inmunitario. Favorecen la activación de macrófagos, células NK y linfocitos, mejorando la respuesta frente a agentes infecciosos y regulando procesos inflamatorios (Vetvicka & Vetvickova, 2011; Zhou et al., 2019).
Además, estudios recientes sugieren que la micoterapia no solo potencia las defensas, sino que también puede contribuir al equilibrio energético, la regulación del estrés oxidativo y la mejora del bienestar general.
En GHEOS Proyecto Natural creemos que el otoño es la estación perfecta para escucharte y cuidar tu equilibrio interior. Por eso te ofrecemos una selección de productos que combinan hongos medicinales con otros principios activos naturales, formulados para:
- Reforzar tu sistema inmunitario.
- Proteger tus mucosas frente a agentes externos.
- Mantener tu energía vital durante el cambio de estación.
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